Vaya puente que me he pegao de categoría. Me hacía falta desconectar del todo y de todo, una buena dosis de tranquilidad (cuando el trasto de mi hijo me dejaba) y serenidad era lo que necesitaba para seguir con fuerza el curso de esta vida en la que todo gira en torno al trabajo, no obstante es lo que más tiempo nos ocupa a las personas. Así que he disfrutado de mi hijo, de mi mujer, hemos cogido coquinas del tamaño de un cacahuete y en cantidad, he disfrutado de Stieg Larsson, aunque aun no me he terminado aun la segunda parte de la trilogía, he hecho como el que pesca, pescaor mas churretero que yo no lo hay, y como no, he disfrutado del ansiado triunfo de mi Sevilla. 
Gracias a Dios se acabó con la mala racha, se necesitaba ganar como sea y se hizo, ante un patético rival, pero se hizo. Sumados al resultado del Mallorca hoy, seguiremos esta semana en la cuarta plaza, esperemos que esto sea el comienzo de un final de temporada acorde a lo que este equipo se merece que es ni mas ni menos que quedar entre los cuatro primeros y como no, intentar ganar la Copa, que eso es otra historia bien diferente.
En definitiva, un fin de semana para enmarcar, las pilas puestas y a esperar a otra que seguro vendrá pronto.
3 comentarios:
quilloooooooooooooooooo,esas coquinas tiene una pinta que me relamo,un abrazo Miguelón y me alegro por ti y por los tuyos el que hallais disfrutado del descanso que merece todo aquel que se lo curra a diario,nos vemos por aqui con un Sevilla que empieza a despuntar,al menos a despertar ilusiones perdidas.
No te digo na Papi, metias el pié y salian a porrillo y grandes, dicen los que entienden de esto que como este invierno no a parado de llover la gente no a cogido coquinas apenas y las han dejado crecer.
Una pasada.
De lujo, primo, de lujo tu fin de semana. Me alegro por ti. Creo que el Miguelito será mejor pescador que tú:):)
Besos y viva nuestro Sevilla, ahora y siempre.
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