Llegaba el descanso de películas como Kárate a muerte en Bangkok o El mono borracho en el ojo del tigre y los chiquillos no poníamos a jugar a pelear delante de la pantalla como posesos, o esperábamos al descanso para jugar al coger por todo el cine de verano. Lo recuerdo como si fuera ayer, y ya hace cerca de treinta años, que barbaridad.
Me he criado justo en frente del cine de verano de Tomares y el hecho de que lo abran nuevamente (como todos los veranos)me hace trasladarme a aquellos años. Con mi bocadillo liao en papel de plata en las noches calurosas de julio, y al salir del cine ver como los mayores seguían sentados en las puertas de sus casas aguantando el tirón para irse a la cama. Ya todo es distinto, uno vive las cosas de otra manera, aunque sigo yendo al cine de verano (ahora con mi niño), o el cine del Rafalito como todos los tomareños lo conocemos, ahora con ese peaso de ambigú, tu botellín fresquito y buena compañía se disfruta de otra forma, pero lo que al fin y al cabo cuenta es que se disfruta.
Gracias a Diós sigue en activo y es de gran orgullo y pena a la vez, saber que es el único cine de verano que queda en la provincia de Sevilla. Si vivís cerca de Tomares y queréis pasar un rato agradable no dudéis en visitarlo, no penséis mal, por esto no me llevo ninguna comisión, es lo que siento.
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2 comentarios:
Yo vivo en Tomares y voy a ese cine todos los veranos.
Me he enterado que abrió sus puertas el pasado fin de semana.
Cuando termine el mundial disfrutaré un año más de esas noches que te trasladan a muchos años atrás, demasiados ya...
Saludos.
Quizás nos veamos por aquí algún día, de momento te voy a enlazar en mi blog.
Un saludo Nacho.
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